El 10 de noviembre de 2017 dejó de existir una figura notable del país que no puede pasar desapercibida; y a pocos días de su partida, deseo rendir mi más sincero homenaje a Fernando Chaves Belaunde, peruano ejemplar, como padre de familia, incomparable persona y brillante profesional. Fue Ingeniero civil de profesión, carrera que la ejerció con dignidad y destreza en las múltiples actividades y obras importantes en las que participó a lo largo de su vida profesional.
Arequipeño de nacimiento, región que amó con profundidad y por la que trabajó incansablemente en la planificación de su crecimiento y desarrollo, y donde vivió la mayor parte de sus 89 años de vida.
Conocí a Don Fernando, a inicios del año 2001, cuando contaba con 73 años de edad, lúcido y activo como siempre lo recuerdo; en aquella época fue asesor del Directorio y de la Gerencia de la Empresa de Generación Eléctrica Arequipa – EGASA, con quien laboré cercanamente desde la Gerencia General de dicha empresa durante 6 años.
Más que un asesor, fue un mentor, que aportó su vasta experiencia y conocimiento para la toma de decisiones en la gestión empresarial, en los aspectos técnicos y sobre todo en la relación con las partes interesadas de la organización.
Trayectoria Profesional de Fernando Chaves
Don Fernando fue un hombre de carácter y determinación, persona activa y visionaria por excelencia; en su amplia trayectoria profesional fue Presidente de la junta de rehabilitación de la ciudad de Arequipa entre los años 1964 y 1968, donde logró diseñar y construir el parque industrial de Arequipa, el Hospital Regional, la fábrica de cemento Yura, la Variante de Uchumayo, la restauración del Centro Histórico y la creación de la Corporación de Saneamiento de Arequipa. Fue Gerente General de Sociedad Eléctrica Arequipa – SEAL por 20 años estando a cargo de la generación, transmisión y distribución eléctrica de toda la Región Arequipa, siendo impulsor de la construcción de la Central Hidroeléctrica Charcani V de 140 MW dentro del Volcán Misti. Asimismo fue Ministro de Transportes entre 1980 y 1982, en el segundo gobierno de Fernando Belaunde Terry, su primo hermano, que le llevó a ser apodado “El Virrey”.
En su visión planificadora, a Don Fernando, siempre le preocupó que a la ciudad de Arequipa no le falte agua, siendo su principal preocupación y, cuando laboramos en EGASA, fue el gestor principal de los proyectos de afianzamiento hídrico de la cuenca del río Chili, tales como el Mantenimiento anual de los 77 km del canal Pañe – Sumbay que lleva el agua desde las alturas de los andes hacia la ciudad de Arequipa; diseñó y supervisó la construcción de la represa Pillones de 80 millones de metros cúbicos (MMC) de agua que lleva el 25% de toda el agua que llega a la ciudad blanca. Asimismo, participó activamente en la primera asociación público – privada del país entre una empresa del estado (EGASA) y una empresa privada (Sociedad minera Cerro Verde) para la construcción de la Represa Pillones y participó en el diseño de otras dos represas: Bamputañe (40 MMC) y Chalhuanca (26 MMC).
Gestor de la Represa Pillones
Recuerdo nuestras múltiples visitas a las alturas de Arequipa para inspeccionar el canal Pañe-Sumbay e identificar posibles fracturas que requerían mantenimiento, logrando, con su persistencia, reducir las pérdidas de agua de 50% a 5% por varios años cuando el mantenimiento estaba a cargo de EGASA. Asimismo realizamos multiples viajes durante los estudios y construcción de la Represa Pillones durante 4 años, y en todo este tiempo, Don Fernando no escatimaba en corregir y llamar la atención a los encargados de la ejecución de obras si veía algo que no estaba bien; pero sobre todo le gustaba enseñar con planos en mano y mostrar sus cálculos acertados. Era un entusiasta de las partes altas de Arequipa, las conocía como la palma de su mano y con su brújula y cámara fotográfica colgada en el pecho gozaba recorriendo sus pampas y montañas, con una vitalidad envidiable.
En varias ocasiones, autoridades de la región y ciudad de Arequipa quisieron condecorarlo en vida, pero a él no le gustaban los homenajes, ni tampoco las fotos; una vez le pregunté porque no quería aparecer en fotografías, y en su típico sentido del humor me respondió: “Ingeniero, el flash a uno le va quitando el alma, y no quiero volverme un desalmado”, soltando una sonrisa.
Asimismo, Don Fernando era un convencido de la necesidad de invertir en carreteras que unan las regiones del país, por ello diseñó la carretera que une a la ciudad de Arequipa con Yura hacia Juliaca-Puno, y que hoy es uno de los ejes principales de la integración de la macro región Sur del país.
Por otro lado, apostó por la educación como principal motor del desarrollo, y tuve el privilegio de participar con él activamente en la elaboración y revisión de textos de varias publicaciones, tales como:
- El Río Chili: Fuente de Vida y Progreso de Arequipa (ver publicación)
- El Misti: Volcán Tutelar de Arequipa (ver publicación)
- Un siglo de Luz en Arequipa (ver publicación).
- Campiña Arequipeña: Vida, Paisaje y Cultura (ver publicación).
Teleférico al Misti: Proyecto pendiente
Hasta hace pocos años estuvo trabajando en un proyecto turístico que aún está pendiente de ejecutar y que soñaba con ver realizado, como es el teleférico al Volcán Misti. Recuerdo una vez que en el año 2003 me comentó que si de algo se lamentaba, por sus múltiples ocupaciones, era no haber podido ascender a la cima del Volcán Misti cuando era joven.
Al año siguiente, en el 2004, quise darle una sorpresa y acompañado de una expedición de dos días, ascendí a la cima del Volcán tutelar de Arequipa, y desde el borde del cráter a 5,800 msnm, llamé por celular a Don Fernando para describirle lo que apreciaban mis sentidos: las fumarolas dentro del cráter, el panorama de la ciudad de Arequipa, los majestuosos volcanes, las lagunas de Aguada Blanca y de Salinas y el olor a ácido sulfuroso que emanaba el cráter activo. Don Fernando recibió la llamada con mucho agrado y emoción, y recuerdo que en ese momento en su casa había gente hablando, y levantó la voz pidiendo que hicieran silencio porque estaba recibiendo una llamada desde el cielo.
Precisamente, ahora él se encuentra en el cielo observando desde lo más alto no solo el cráter del Misti si no a su bella ciudad de Arequipa por la que tanto hizo. Don Fernando no amasó gran fortuna, fue un hombre dedicado a su trabajo, a su familia y a los demás. Personas como él ya no quedan muchas, correctas, con valores y con un alto sentido del deber y de servicio al prójimo.
Por ello con mucho afecto y admiración, en su memoria rindo un merecido homenaje a Fernando Chaves Belaunde, peruano ejemplar. Mis condolencias a su esposa Elizabeth Bellido y a toda su familia; el Perú pierde a un hombre valioso, pero sus obras y legado perdurarán para siempre.
2 comentarios en “Homenaje a Fernando Chaves Belaunde, peruano ejemplar”
Extraordinario hombre, un 10, como todos fueran asi y la historia del Perú seria diferente.
Excelente y justo homenaje para un gran hombre, muchos de los políticos actuales deberían de tomarlo como modelo en todos los aspectos, Profesional, Ético, Amor por su País y por su Patria Chica, Honradez, Desapego a lo Material, Seguidor de sus Objetivos y un Padre de Familia Notable, como suelen ser los grandes hombres. Nos dejó un Legado muy grande para el País y sobre todo para su querida Arequipa . Dios lo tenga en su Gloria.